Me pregunto en silencio por qué hay estatuitas de dioses hindúes e imágenes de Buda si los sikh son monoteístas, pero creo que no es momento de preguntarlo; no entiendo un carajo.
-¿Primera vez en la India?- me pregunta la mujer. Tendrá unos 40 años, es muy delgada, de piel bronceada y lleva un pequeño pendiente entre las cejas. Pantalones holgados, blusa de tirantes y sandalias. Por el acento, es española, y tiene toda la pinta de –como dice mi amigo Marcos- una perroflauta.
Con vergüenza, amor, con odio, con miedo, así se escribe poesía en el país que odia a las mujeres.
Tu amor por esta ciudad siempre sobrepasó toda convención. La fuerza que yo no tuve para quedarme tú la volviste semillas, abriste siempre tu pecho, a los tuyos y a los extraños, la ciudad te cubrió de besos y... Seguir leyendo →
Llevo un mes pensando en lo que pasó en estos seis años. O en lo que dejó de pasar, en lo que va a pasar ahora, en lo que no quiero que pase.
Dejaron de dolernos sus nombres, dejamos, con mucho esfuerzo, de cargar con sus adioses. Finalmente los vencimos.
Durante más o menos un año, un español, un colombiano y un mexicano se reunieron cada dos sábados en algún bar de Cracovia para hablar de literatura –aunque a veces terminaban hablando del desgobierno polaco, de punk y neoporno, o del precio de la carne o cualquier tontería-
El guía del Free Walking Tour –un joven israelí- nos deja muy claro que no es recomendable ir a los territorios palestinos, que puede ser peligroso y que es muy complicado pasar los controles, el camino es largo, el transporte malo, etc. Pero Dean –un canadiense de padres colombianos que conocí durante el tour- y yo, estamos empeñados en visitar Palestina, así que después de preguntar un poco aquí y allá logramos subirnos a un destartalado minibús hacia Belén, en la región palestina de Cisjordania.
Es el mejor día del año, y uno de mis sueños se me presenta en bandeja de plata. Mi amigo Nacho me dice que si quiero ser parte del jurado del jueves grasoso, o jueves gordo, como lo llaman en inglés (Fat Thursday). Y yo por un momento creo en un Dios bondadoso, aunque minutos después lo maldiga.