Lo estamos haciendo bien

¿quién lo diría?

 

Yo cada día pienso menos en ella,

tú ya no miras de reojo cuando en la calle

crees reconocerlo a él.

 

No lo decimos,

lo estamos haciendo bien

y lo sabemos.

 

Ya no queremos matarnos de una sus fantasmas,

vamos aprendiendo a llevarlos de la mano

solo para soltarlos al precipicio.

 

En definitiva,

lo estamos haciendo muy bien,

 

aunque sé que cualquier día,

alguien,

inocentemente,

me preguntará por ella.

 

Sé que cualquier tarde,

sin quererlo,

quizá te cruces en la calle con él.

 

 

 

 

Este poema es la continuación de Simulacros #1

Si te gustó, no dejes de leer el final, en Simulacros #3